A los nacidos en el Amazonas se les denomina amazonenses y a los nacidos en Leticia, leticianos.
Desde el siglo XVIII, el área donde hoy se encuentra la ciudad binacional Leticia-Tabatinga, ha tenido una importancia fundamental porque refleja, simultáneamente, las diferencias y las afinidades entre el mundo de origen hispánico y portugués. Allí se concentraron las luchas entre los misioneros jesuitas y los bandeirantes del Pará por la permanencia o exterminio de los pueblos Omagua; allí se enfrentaron las comisiones de límites, en los siglos XVIII, XIX y XX, para determinar las fronteras, y allí se han mezclado las economías, los pueblos y las culturas para formar una sociedad trinacional y multi-étnica totalmente nueva.
Sin embargo, dada la situación geográfica tan particular, el gentilicio del leticiano se puede clasificar de la siguiente manera:
-Leticiano abrasilerado: nacido en Leticia, de padres (uno o ambos) brasileros y que desde pequeño domina el idioma portugués.
-Leticiano indigenado: nacido en Leticia, de padres indígenas (uno a ambos).
-Leticiano acolombianado: nacido en Leticia, de padres del interior del país.
-Leticiano aperuanado: nacido en Leticia, de padres peruanos (uno o ambos).
-Leticiano: netamente de padres Leticianos
Etnias presentes
En toda la región amazónica colombiana existen aproximadamente 26 etnias indígenas con una población aproximada de 47.000 miembros. Se destacan 14 familias lingüísticas entre las cuales, las más numerosas son las familias tukano, arawak, tikuna, huitoto y tupí.
Los cálculos siguen siendo muy aproximados debido a la dificultad para conocer con exactitud los desplazamientos de las poblaciones de la zona. Tal es el caso de numerosos indígenas que viven en ciudades o en núcleos urbanizados, que han perdido su lengua y su identidad o grupos como los Urumi o los Yurí cuya ubicación es hipotética.
El departamento de Amazonas se puede dividir en tres grandes regiones de acuerdo con el predominio de ciertos grupos lingüísticos:
Región al norte del Río Caquetá
Comprendida entre los ríos Apoporis y Yarí. En esta región han predominado grupos de habla tukano oriental, especialmente en la cuenca del río Mirití-Paraná: Yucuna, Yucuna–Matapí, Letuama, Tanimuca, Macuna y Cawiyarí. Más al occidente, o a orillas del Río Caquetá, se sitúan los Miraña, que pertenecen a la familia lingüística Tupí. Estos grupos se caracterizan por ser pequeños. En la mayoría de los casos son agrupamientos de menos de cincuenta habitantes, concentrados en grandes malocas o caseríos. Una de las causas de la poca densidad poblacional es la existencia, durante varios siglos, de esclavitud y enfermedades, principalmente introducidas por colonizadores y empresas caucheras; adicionalmente, se alude a las dificultades geográficas, climáticas y del medio ambiente.
Región entre el Caquetá y el Putumayo
En esta región predomina el grupo etnico-linguístico huitoto, cercano a otros grupos como los Boras, Miraña y Muinane. Esto ha ocasionado que, en algunos casos, sus culturas se mezclen.
Los Huitotos tradicionalmente vivieron en las hoyas del Putumayo y Caquetá, en los ríos Caraparaná, Igaraparaná, Nocaimaní, Alto Cahuinarí y zonas interfluviales, pero por la actividad de las caucherías fueron desplazados de sus territorios tradicionales, llegando a territorio peruano.
Actualmente viven en los siguientes resguardos, algunos de ellos compartidos con otros grupos étnicos:
-Punta Zábalo y los Monos 11.540 hectáreas
-Monochoa 222.440 hectáreas
-El Quince 1.250 hectáreas
-Witorá 67.220 hectáreas
-Predio Putumayo 5.818.702 hectáreas
-Amenanae 6.960 hectáreas
-Jirijirí 4.960 hectáreas
-Coropoya 3.923 hectáreas
Los indígenas Huitotos están organizados en clanes y linajes patrilineales exógamos cuyo referente ha sido la maloca. Hay una jerarquía entre linajes dominantes y subordinados que se refleja en la distribución de sus miembros en la maloca. Los clanes se identifican con nombres totémicos relacionados con plantas, animales o fenómenos naturales.
Región del Trapecio Amazónico
Grupo étnico Ticuna
Están ubicados en las regiones vecinas de Brasil y Perú y tienen una lengua independiente. Han sido duramente afectados por las caucherías, la acción evangélica y la colonización del trapecio Amazónico hasta llegar a transformar fuertemente su cultura. Actualmente los ticunas se encuentran ubicados en las riveras del río Cotuhé, en las comunidades de Tarapacá, Caño Ventura, Santa Lucía y Buenos Aires; en las riveras del río Amazonas, en Arara, Macedonia, Vergel, Mocagua y Zaragoza; en el río Amacayacú, en San Martín de Amacayacú; en el río Loretoyacú, en Puerto Nariño. Hoy son reconocidos los siguientes resguardos:
Arara 12.308 hectáreas
San Antonio de los Lagos 188 hectáreas
San Sebastián, Santa Sofía y el Progreso 4.209 hectáreas
Nazareth 1.367 hectáreas
Mocagua 5.255 hectáreas
Macedonia 3.410 hectáreas
El Vergel 2.525 hectáreas
Zaragoza 5.560 hectáreas
Río Cotuhé y Putumayo 245.227 hectáreas
Hoy viven en caseríos con una población creciente. La estructura de cada pueblo se asemeja a la de los blancos debido a la construcción de iglesias por la creciente presencia religiosa.
La estructura organizativa de los Ticunas está directamente relacionada con una naturaleza que ellos mismos han humanizado. El hombre es parte de esa naturaleza y se clasifica frente a ella bajo el concepto de Kiá, que significa: gente de. Esto permite que se establezcan alianzas e identidades con ancestros míticos, animales de monte, seres de agua, plantas, entre otros. El sistema social está dado por patrilinajes asociados a dos mitades de carácter exogámico: este-oeste, arriba-abajo y a unidades de filiación patrilineal.
En la actualidad, a pesar de la desaparición de las malocas y la creación de caseríos ribereños, se sigue conservando el predominio del Kiá en la territorialidad, aunque se identifican varios Kiá en una misma aldea. Las aldeas, en su interior, están gobernadas por los Curacas, quienes tienen a su cargo la coordinación de actividades de la comunidad, llevar las relaciones institucionales y otras responsabilidades asociadas. Por eso mismo, deben saber leer, escribir y hablar español.
Grupo étnico Yagua
Actualmente hay Yaguas en Perú, Colombia y Brasil. Tienen una lengua independiente. Este grupo étnico ha tenido un proceso de migración hacia el trapecio Amazónico colombiano. El territorio tradicional estaba ubicado entre los ríos Atacuari, Yaguas y Putumayo. Actualmente, además de los lugares anteriores, hay Yaguas en la desembocadura del río Napo, cerca de los ríos Yavarí, Curuza e Ituy en el Brasil y sobre el río Amazonas cerca a Leticia.
La vivienda tradicional o cacamera, es una maloca multifamiliar que alberga hasta 10 familias. El tipo de construcción es elíptico, de forma cónica, cubierta de hojas de palma con dos entradas bajas. Cada familia tiene un lugar asignado donde están las hamacas. Como complemento de esta construcción tradicional están las viviendas que sirven de cocina, de techo a dos aguas y sin paredes. El caserío es un patrón de asentamiento que está presente entre los yaguas y es frecuente que se establezcan cerca a los poblados blancos. La selva constituye un multiespacio donde practican la cacería, la recolección y tienen sus chagras, un poco retiradas de los caseríos.
La descendencia es patrilineal y de matrilocalidad temporal al comienzo del matrimonio, donde el yerno le sirve al suegro por un tiempo para luego volver a la casa paterna. Son exógamos, lo que significa que no pueden contraer matrimonio con ninguna mujer que pertenezca a la misma maloca o caserío. Se dan casos de relaciones bigámicas por rango y condición económica. Se cree que estuvieron divididos en clanes exogámicos designados por nombre de animales o vegetales. Cada comunidad tiene un jefe, capitán o curaca que es la máxima autoridad en asuntos civiles y culturales. La transmisión de cargo se hace del curaca anciano al hijo mayor. Normalmente el curaca es el brujo de la comunidad. Es una persona respetable, con mucha autoridad.